El autismo, o trastorno del espectro autista (TEA), es una condición del neurodesarrollo que afecta la manera en que una persona percibe, se comunica y se relaciona con el mundo que la rodea. Se caracteriza por dificultades en la interacción social y la comunicación, junto con patrones de comportamiento, intereses o actividades restringidos y repetitivos. El término “espectro” refleja la amplia variabilidad en la presentación y severidad de los síntomas, abarcando desde formas leves hasta casos más complejos que requieren apoyo significativo. El autismo comienza en los primeros años de vida y suele manifestarse antes de los tres años, aunque en ocasiones puede detectarse más tarde.